Una de esas tardes nostalgicas de Madrid
09 octubre 2006
Anna Politkovskaya“Hay personas que a veces pagan con su vida el manifestar lo que piensan en voz alta. También te pueden matar solo por transmitir informaciones.
Por: Alberto Amortegui
Nuevamente han sacado su guadaña los verdugos de la palabra y las libertades. Anna Politkovskaya ha sido asesinada el pasado sábado 7 de octubre. El mismo día en que Reporteros sin Fronteras inauguraba el Memorial de los Reporteros. Construido para rendir homenaje a los reporteros que han caídos en el mundo desde el año de 1994. Ese mismo día otros dos periodistas fueron asesinados en Afganistán.
Los dos periodistas alemanes, un hombre y una mujer, que trabajaban en la radio alemana Deutsche Welle, les mataron en la noche del viernes al sábado unos hombres armados con AK-47. Se encontraban durmiendo en una tienda en la provincia de Baghlan, al norte de Kabul, e iban de camino hacia el histórico lugar de Bamiyán. No les robaron sus efectos personales. No había interés en ello, es posible que el interés
de los asesinos era el de silenciar la palabra, impedir la información.
Anna Politovskaya, reportera del periódico independiente Novaya Gazeta, resultó abatida el sábado en su apartamento del centro de Moscú. Era muy conocida por su postura crítica hacia el presidente Vladimir Putin, y por sus reportajes sobre Chechenia.
En 2004, en el momento de la toma de rehenes en Beslán, la periodista tuvo que ser conducida al hospital, a causa de un envenenamiento alimenticio, cuyo origen pudo ser intencionado.
Anna Politovskaya participó en diciembre de 2005 en una conferencia sobre la libertad de prensa, organizada por Reporteros sin Fronteras en Viena. Aquel día, dijo en su intervención: “Hay personas que a veces pagan con su vida el manifestar lo que piensan en voz alta. También te pueden matar solo por transmitir informaciones. No soy la única que está en peligro. Tengo ejemplos que lo prueban”.
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